Eladio Carrión en Chile: energía, respeto y trap sin límites

por Nathalia Olivares
Eladio Carrión volvió a demostrar por qué Chile es uno de sus territorios más fieles. En el marco de su "DON KBRN LATAM TOUR", el puertorriqueño llenó el Movistar Arena con una performance que mezcló intensidad, estética cinematográfica y una comunión absoluta con su público. Con un escenario envuelto en pantallas, luces rojas y bailarines al estilo ninja, el show arrancó a las 21:00 en punto con "Invencible", abriendo un set cargado de fuerza y precisión visual. Desde el primer tema, la energía fue desbordante: el recinto, casi al tope de su capacidad, vibró al ritmo de "Ohtani", "Vetements" y "H.I.M", en una euforia que no conoció pausas.
La sinergia entre artista y audiencia fue total. Carrión no solo se entregó vocalmente, sino también físicamente, moviéndose por todo el escenario con una energía que contagió a miles. Los pogos se multiplicaban, el humo y la pirotecnia creaban una atmósfera de caos controlado y, en medio de todo, el boricua agradecía constantemente a Chile, un país que —como él mismo recordó— lo acompañó desde sus primeros pasos, cuando actuaba en discotecas locales. Ese lazo se ha transformado en una historia compartida de crecimiento, y su show en el Movistar fue una reafirmación de que el cariño es mutuo.
El setlist recorrió toda su discografía: desde los himnos de "Sauce Boyz" hasta las piezas más frescas de "DON KBRN" (2025), su álbum más reciente y el corazón del tour. Pero fue en los clásicos donde el público alcanzó su punto máximo. Con "Mbappé" como cierre apoteósico, Carrión selló una noche que fue puro fuego y lealtad. Entre luces, gritos y banderas chilenas, el rapero se despidió con la frente en alto y la promesa implícita de volver pronto. En su paso por Chile, Eladio no solo ofreció un concierto: confirmó que su vínculo con el país es tan fuerte como su presencia sobre el escenario.
